¿SABES LO QUE ES LA FIMOSIS? ACÁ TE EXPLICAMOS
Fuente: Diario Mi Hijo Ed.63La fimosis es la imposibilidad de bajar la piel del prepucio, una capa de piel suave que rodea el extremo del pene, llamado glande, para protegerlo y lubricarlo. Cuando son guaguas, es absolutamente normal que se produzca fimosis en los niños, porque el prepucio y el glande están adheridos desde el nacimiento. En forma natural, con el paso del tiempo, en pocos años, estas adherencias van desapareciendo y la piel puede ir bajando cada vez más. En ocasiones, pese a que las adherencias van desapareciendo, la piel puede presentar una especie de anillo que impida bajar la piel.
Con el paso del tiempo, gracias a que los niños se tocan, estiran la piel, empiezan a tener erecciones y a que el pene va aumentando su tamaño, la fimosis va desapareciendo. Aunque ocasionalmente hay quienes recomiendan retraer poco a poco la piel en casa para que vaya bajando, es mejor no hacerlo porque algunos padres, al intentarlo, pueden provocar heridas en la piel del prepucio al forzar sin delicadeza o con más fuerza de la necesaria generando el efecto contrario, es decir, que la fimosis permanezca por más tiempo, que la piel se haga más gruesa y menos elástica.
Si la fimosis persiste a pesar del paso del tiempo o si hay síntomas asociados, entonces hay que actuar. ¿Cuáles son los síntomas?
- Dolor e inflamación al orinar porque ésta se acumula (la orina tiene tanta dificultad para salir, que la distensión del prepucio provoca un verdadero globito que duele al distenderse porque la presión de salida de la orina es mayor que la de la piel y el orificio pueden asumir).
- Tenga infecciones urinarias.
- Sufrir balanitis, infección causada por irritación del glande.
Para evitar la operación, se puede intentar uso de tratamientos con pomadas o cremas con corticoides o derivados hormonales, siempre bajo supervisión médica y con controles adecuados.
Aunque no haya síntomas ni molestias, puede que la fimosis no se solucione con el paso de los años. Cada vez se procura operar más tardíamente para dar tiempo a que solucione por sí mismo o con tratamientos locales. Lo ideal, para evitar la anestesia general, sería operar de fimosis a partir de los 8 años, edad en la que es posible conseguir las condiciones para administrar anestesia local.
La intervención de fimosis recibe el nombre de circuncisión y consiste en recortar y extirpar una parte de la piel del prepucio que permita la liberación del glande.