¿SE RELACIONA EL USO DE MASCARILLAS CON EL BRUXISMO INFANTIL?
Fuente: Diario Mi Hijo Ed.76La pandemia de coronavirus que atravesamos está provocando un aumento de los casos de bruxismo en niños. Esto es producto de la suma del estrés propio de la pandemia y por el uso de mascarilla, la que no permite que se pueda relajar la mandíbula. De esta forma, a las consecuencias negativas en el aprendizaje y en su desarrollo emocional, se suman también los problemas físicos generados por la actual situación de salud.
Pero ¿qué es el bruxismo, exactamente? Cuando hablamos de bruxismo, hablamos de un uso excesivo de los músculos de la mandíbula (que a menudo sucede de manera inconsciente), que provoca rechinar de dientes y que puede provocar contracturas en el cuello y la cabeza, dolor de oídos, bloqueos en la mandíbula, desgaste en las piezas dentales, cefaleas, molestias al masticar…
El problema más común que afecta a los niños, derivado de esta patología, es la caída de los dientes de leche antes de tiempo. Y es que, por regla general el bruxismo se produce durante la noche y con mayor frecuencia en niños de entre seis y diez años, justo la edad a la que cambian los dientes.
Aunque el estrés es una de las principales causas que están llevando a los aumentos de diagnóstico en esta afección, la mascarilla también tiene gran parte de culpa. Y es que no permite que nuestra mandíbula descanse en su posición natural, ya que su colocación dibuja la línea por la que tiene que recorrer y, además, ejerce presión sobre el hueso de la mandíbula.
Esto, unido al continuo movimiento que hacemos para conseguir que se quede en su sitio, los esfuerzos para evitar que no se mueva al hablar, al toser, al estornudar o al bostezar, entre otros, hacen que tengamos la mandíbula constantemente en tensión. Por lo tanto, podríamos estar desencadenando mal función en ella y, como consecuencia, llegar al bruxismo.
¿Cómo prevenir el bruxismo por el uso de la mascarilla?
Realizar actividades relajantes antes de ir a dormir puede ayudar mucho a disminuir el miedo o estrés que favorecen el bruxismo durante la noche. También es bueno colocar una toalla tibia contra la mejilla, delante del lóbulo de la oreja para ayudar a que los músculos se relajen y no se contraigan mientras duermen.
La mandíbula es una articulación que se sobrecarga por un mal uso como, por ejemplo, morderse las uñas, masticar solo por un lado de la boca, morder bolígrafos, o masticar chicle excesivamente, por lo que evita estos hábitos en tu hijo.
Entonces, mascarilla y bruxismo pueden estar relacionados, pero no deben considerarse como la causa única así que, de todas maneras, si notas que tu hijo rechina los dientes, recuerda que la mascarilla puede ser un factor que contribuya a las molestias, pero puede haber otras situaciones que no deben ignorarse por lo que es recomendable que lo consultes con tu pediatra quien podrá orientarte y revisar si se requiere otros apoyos o tratamientos.